La mayor concentración opositora desde la llegada al poder del chavismo

El candidato de la oposición venezolana, Henrique Capriles, logró reunir ayer a la mayor concentración de personas vista en Caracas para asistir a un acto no organizado por el chavismo desde que éste tomó el poder hace 14 años.

Desde seis puntos de la capital marcharon decenas de miles de ciudadanos que apoyan la opción electoral de Capriles hasta desbordar la avenida Bolívar, termómetro político para medir si un candidato tiene opciones o no en Venezuela.

Animado por la marea humana que contemplaba desde el estrado, Capriles, con un rosario al cuello y una camisa color rojo, aseguró que la candidatura de Maduro “se desplomó” y “va en caída”.

“Nuestro pueblo ha ido abriendo los ojos y se ha ido dando cuenta de lo qué está pasando: que las cosas como van hoy no van a ningún lado positivo, esa candidatura se desplomó y va en caída”, declaró.

“No sean triunfalistas”. A pesar de que todas las encuestas, excepto una, dan una desventaja de entre 10 y 20 puntos con Maduro, Capriles aseguró que va a ganar y que aunque la diferencia “puede ser grande” pidió a sus seguidores no ser triunfalistas y no creer “que ya la tarea se hizo”.

Dijo que hace 20 días él no hubiera prometido que iba “a llegar” porque el país estaba “abrumado” tras la muerte del presidente Hugo Chávez, fallecido el pasado 5 de marzo víctima de un cáncer, pero reiteró que el país ha ido despertando.

“No seas ridículo”. Capriles también dedicó espacio para atracar directamente a Maduro acusándole de ser un “vago” porque cuando era chofer de autobuses no trabajaba y se dirigió a él llamándole “mentira fresca” de forma reiterada.

Sobre la denuncia de Maduro de que la “derecha salvadoreña” pagó a unos mercenarios para asesinarlo y crear un clima en Venezuela de “homicidios bárbaros” y apagones eléctricos, Capriles declaró que su adversario “ahora anda con la ridiculez de que alguien va a atentar contra su vida, que vienen unos mercenarios de no sé dónde”.

“Yo te lo digo desde aquí Nicolás, no seas ridículo chico” y recordó que recientemente Maduro también denunció que querían matarlo a él como líder opositor.

Resaltó que el problema en Venezuela es que “caen 50 hermanos todos los días” víctimas de la violencia y aseguró que el Gobierno “no ha hecho nada para controlarla”.

La Crónica, 8 de abril.