En entrevista, el mandatario estatal aseguró que Malova está en entera libertad de definir su futuro político, y si bien “toda deserción afecta de menor manera, el partido está muy por encima de cualquier visión personal o facciosa”.
Aguilar Padilla sostuvo que López Valdez es un priista distinguido, un cuadro importante, pero que en una democracia como la nuestra se da este tipo de fenómenos.
Rechazó que pueda darse una fractura en el priismo sinaloense si sale el legislador de ese partido y sostuvo que el PRI está unido y los efectos que se advierten son parte de un fenómeno preelectoral.
“No hay hecho que despierte mayor pasión que la política, pero el PRI está unido y tiene procedimientos y fortaleza institucional para darle cauce a todas estas expresiones”, afirmó.
A pregunta específica, el gobernador de Sinaloa dijo que “ningún militante quita el sueño; el partido es una organización fuerte, con estructura, con programa, con una visión de Estado y con una solidaridad con el país y preocupado por los grandes problemas del país”.
Negó que como mandatario de esa entidad apoye a un candidato en particular, en alusión al alcalde con licencia de Culiacán, Jesús Vizcarra, y sostuvo que ha sido muy respetuoso del proceso, al reafirmar que las campañas electorales son un tema de los partidos, de los ciudadanos y de los órganos autónomos que son árbitros.
México/Mauricio Pérez, Milenio, 2 de marzo.
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