Con el telón de fondo de la presunta colaboración del gobierno venezolano con ETA apuntada esta semana por un juez de la Audiencia Nacional española, el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero pidió ayer al presidente Hugo Chávez que respete tanto a la corte como a España “si quiere ser respetado”. Esta vez fue la vicepresidenta primera del Ejecutivo español, María Teresa Fernández de la Vega, la que realizó la petición a Caracas, en una rueda de prensa tras el consejo de ministros.
También el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, instó al presidente venezolano a mostrar mejores formas. “Si pido colaboración a Venezuela es incompatible con decir según que cosas”, dijo en una entrevista con Televisión Española (TVE), refiriéndose a la posible alianza entre ETA y las FARC. “Para que esa colaboración vaya bien hay que ser prudente en lo que se dice”. Rubalcaba, sin embargo, descartó que exista “permisividad” del gobierno de Chávez hacia el grupo independentista armado.
Tras el auto del juez Eloy Velasco se ha producido esta semana una escalada verbal entre España y el presidente Chávez, quien con formas tensas dijo el miércoles que no tiene “nada que explicarle” a Zapatero e instó al jefe del Ejecutivo español a pedir “explicaciones a ese juez irresponsable”, en referencia a Velasco.
Moratinos quiso suavizar el tono el jueves y aseguró que en su conversación con Chávez tras conocerse el auto judicial no le pidió “explicaciones” sino “información”. La Justicia española es “independiente” y Venezuela debe “colaborar para aclarar unos hechos muy graves”, dijo ayer De la Vega, que rechazó las acusaciones de “tibieza” en su proceder con Caracas emitidas desde la oposición.
Según explicó la vicepresidenta primera, Madrid trasladó a Caracas de manera verbal el contenido del auto emitido esta semana por el juez Eloy Velasco. El documento, sin embargo, aún no se ha enviado físicamente a Venezuela porque la asesoría jurídica del Ministerio de Exteriores estudia aún algunas cuestiones, dijo.
Al parecer, el tema más complicado es la extradición del presunto miembro de ETA Arturo Cubillas, casado con una venezolana y con nacionalidad venezolana adquirida. Según el juez Velasco, Cubillas es desde 1999 el “responsable” de ETA en Venezuela, donde se encarga de coordinar las relaciones entre la organización separatista vasca y las FARC. El presunto etarra fue nombrado en 2005 director adscrito a la Oficina de Administración y Servicios del Ministerio de Agricultura y Tierras de Venezuela.
“Lo que debemos pedir al gobierno venezolano es colaboración con la Justicia. Tienen que colaborar con la justicia española”, insistió ayer el ministro Rubalcaba.
También el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, instó al presidente venezolano a mostrar mejores formas. “Si pido colaboración a Venezuela es incompatible con decir según que cosas”, dijo en una entrevista con Televisión Española (TVE), refiriéndose a la posible alianza entre ETA y las FARC. “Para que esa colaboración vaya bien hay que ser prudente en lo que se dice”. Rubalcaba, sin embargo, descartó que exista “permisividad” del gobierno de Chávez hacia el grupo independentista armado.
Tras el auto del juez Eloy Velasco se ha producido esta semana una escalada verbal entre España y el presidente Chávez, quien con formas tensas dijo el miércoles que no tiene “nada que explicarle” a Zapatero e instó al jefe del Ejecutivo español a pedir “explicaciones a ese juez irresponsable”, en referencia a Velasco.
Moratinos quiso suavizar el tono el jueves y aseguró que en su conversación con Chávez tras conocerse el auto judicial no le pidió “explicaciones” sino “información”. La Justicia española es “independiente” y Venezuela debe “colaborar para aclarar unos hechos muy graves”, dijo ayer De la Vega, que rechazó las acusaciones de “tibieza” en su proceder con Caracas emitidas desde la oposición.
Según explicó la vicepresidenta primera, Madrid trasladó a Caracas de manera verbal el contenido del auto emitido esta semana por el juez Eloy Velasco. El documento, sin embargo, aún no se ha enviado físicamente a Venezuela porque la asesoría jurídica del Ministerio de Exteriores estudia aún algunas cuestiones, dijo.
Al parecer, el tema más complicado es la extradición del presunto miembro de ETA Arturo Cubillas, casado con una venezolana y con nacionalidad venezolana adquirida. Según el juez Velasco, Cubillas es desde 1999 el “responsable” de ETA en Venezuela, donde se encarga de coordinar las relaciones entre la organización separatista vasca y las FARC. El presunto etarra fue nombrado en 2005 director adscrito a la Oficina de Administración y Servicios del Ministerio de Agricultura y Tierras de Venezuela.
“Lo que debemos pedir al gobierno venezolano es colaboración con la Justicia. Tienen que colaborar con la justicia española”, insistió ayer el ministro Rubalcaba.
Milenio, 6 de marzo.
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