“Juárez se les fue de las manos a todos”

El presidente del Senado, Carlos Navarrete, admitió que la violencia en Ciudad Juárez se le ha salido de las manos a las autoridades y señaló que la condena del presidente Barack Obama al asesinato de las tres personas vinculadas al consulado de Estados Unidos es un elemento que añade gravedad a lo que ocurre en esa urbe fronteriza.

También aseguró que México “está infestado de armas estadunidenses” y demandó que la indignación del presidente del vecino país sirva para que las autoridades de esa nación comprendan la gravedad del problema.

Reiteró que las víctimas fueron asesinadas “con armas que se venden impunemente en el lado estadunidense y que pasan tranquilamente por la frontera.

“De manera dramática el presidente Obama ha visto las consecuencias de no haber parado la venta de armas y las consecuencias de que en México la impunidad no haya sido combatida”, subrayó.

A esta demanda se sumaron diputados de PRI y PRD —como Héctor Pedraza y Rogelio Cerda— y el panista Gustavo Madero, quien consideró que la indignación de Estados Unidos por el triple asesinato del pasado sábado en Ciudad Juparez debe traducirse en un mayor involucramiento en el combate al crimen organizado.

“Se requiere una cooperación bilateral y México no puede estar cargando con los muertos y los estadunidenses con el consumo y la exportación de las armas.”

En tanto, Navarrete urgió al Presidente a que redefina la estrategia de combate al hampa y se comprometió a que el Senado sacará adelante con prontitud la Ley de Seguridad Nacional.

“El objetivo es seguir dando al gobierno más instrumentos para ser más eficaces, aunque con los que ya tiene podría actuar.

“La situación se ha salido de control pese a los esfuerzos de todos (los niveles de gobierno) y hay una necesidad de que Calderón redefina los mecanismos de atención, porque estamos frente a una situación absolutamente desbordada y descontrolada”, indicó el legislador.

Patrullajes binacionales

Por separado, Ramón Galindo, senador panista por Chihuahua, insistió en la necesidad de crear una policía binacional que patrulle ambos lados de la frontera y calificó el triple asesinato de “incidente internacional”.

Por su parte, el presidente de la Comisión de Seguridad Pública, el panista Felipe González, reclamó que se cierre la frontera al tráfico de armas para combatir de manera eficaz al crimen organizado.

El legislador perredista Nazario Sánchez alertó a su vez sobre el riesgo de una intervención de Estados Unidos en México con agentes policiacos o incluso tropas militares, so pretexto de colaborar en la lucha aticrimen.

México • Liliana Padilla, Angélica Mercado y Fernando Damián, Milenio, 16 de marzo.