Íngrid llama a las FARC a hacer la paz

BUENOS AIRES.— Íngrid Betancourt parece correr el maratón de la libertad. En sus primeras 24 horas desde que fue liberada, no sólo fue desbordada por las emociones familiares sino que advirtió que no descarta renunciar a la vida política, aunque reconoció que mantiene en pie su añejo compromiso de bregar por la liberación del resto de los rehenes en poder de las FARC.
Además, Íngrid regresó a la libertad con una propuesta política de grandes dimensiones: emprender una cruzada internacional para exigirles a las FARC el desmonte total de la lucha armada en Colombia.

Para Íngrid, las “FARC deben entender que ya no representan nada bueno ni respetable en Colombia”, de ahí que volvió a conminarlas “a hacer la paz”.

Ayer fue otro de los días más esperados por la ex candidata presidencial. Después de una noche interminable en la que durmió en casa de su madre, Yolanda Pulecio, se reencontró con sus hijos Melanie y Lorenzo, con su hermana, Astrid y el resto de su familia, ante la que se mostró emocionada.

“El paraíso, el Nirvana debe ser muy parecido a lo que estoy sintiendo”, afirmó Íngrid en un improvisada conferencia de prensa al pie del avión oficial francés que trajo a su familia y al canciller Bernard Kouchner, y en la que volvió a respaldar al gobierno de Álvaro Uribe y pidió a los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez y de Ecuador, Rafael Corrrea, recomponer el diálogo con la administración Uribe para poder “lograr más liberaciones unilaterales” por parte de las FARC.

La respuesta fue rápida y al parecer positiva, ya que luego de mostrarse “feliz por la liberación de Íngrid y la forma en que se logró”, Chávez manifestó su disposición a colaborar con la liberación “del último rehén en Colombia”. “Ayer llamé a Uribe para felicitarlo”, acotó el mandatario venezolano, quien volvió a pedirle a las FARC que recapaciten y “liberen a todos los rehenes”.

Horas después, se conoció la liberación por parte de la guerrilla de Alf Onshuus Niño, un biólogo noruego-colombiano, que había sido secuestrado en enero último.

Según la Cancillería noruega, “esto no tiene nada que ver con el pedido de la doctora Betancourt. Fue casualidad”.

Por otra parte, el ejército, a través de su comandante el general Mario Montoya, presentó ante la opinión pública a los dos guerrille ros detenidos durante la liberación de los 15 rehenes. Se trata de Gerardo Aguilar Ramírez, más conocido como César, y Alexander Farfán, alias Gafas.

Anoche la ex candidata presidencial viajó a Francia para entrevistarse con el presidente Nicolas Sarkozy, y agradecerle todas las acciones a favor de su libertad que llevó adelante el Estado francés.

José Vales, corresponsal, El Universal, 4 de julio.