CIUDAD JUÁREZ.- Tras sostener que no hay soluciones mágicas para contener al crimen organizado, el Presidente Felipe Calderón apremió ayer a los tres órdenes de Gobierno y a la sociedad a "cerrar filas" para garantizar la seguridad de los ciudadanos.
Fuertemente custodiado por el Estado Mayor Presidencial (EMP), Calderón comprometió el apoyo del Gobierno federal a Ciudad Juárez, que en las últimas 72 horas resintió la muerte de al menos 12 personas vinculadas con hechos delictivos.
"Esta es una lucha (<00a6>) que sólo podremos ganar con unidad. Hoy se requiere que los tres órdenes de Gobierno y que la sociedad civil junto con el Gobierno cerremos filas y actuemos de manera corresponsable y coordinada para garantizar la seguridad de los ciudadanos", planteó.
El Mandatario federal efectuó una incursión de siete horas por esta ciudad fronteriza para inaugurar dos plantas y comer en privado con un reducido grupo de empresarios.
Tanto el Alcalde José Reyes Ferriz, como el Gobernador de Chihuahua, José Reyes Baeza, reconocieron la lucha que ha emprendido Calderón contra el crimen organizado, pero al mismo tiempo le pidieron que no descuidara la entidad.
"Quiero decirle a Ciudad Juárez, a los juarenses, a sus autoridades, que en esta batalla, hay que lograr que sea la ciudad segura que todos anhelamos que sea, no están solos.
"El Gobierno federal ha estado y seguirá estando con todo el apoyo a Ciudad Juárez", ofreció el Presidente durante la ceremonia de inauguración de una planta de lavadoras y secadoras de la firma Electrolux.
El Ejecutivo federal recordó que ante el aumento de la delincuencia que principios de año azotó a Juárez -y que achacó a la lucha que libran entre sí grupos criminales- su Gobierno tomó cartas en el asunto y dispuso el envío de al menos 4 mil elementos de las fuerzas federales y del Ejército para fortalecer la seguridad ciudadana.
Calderón se haría eco de la propuesta que para depurar los cuerpos policiacos puso sobre la mesa el Alcalde José Reyes, y consideró que este proyecto debía ser asumido por todos para contar con una Policía sin compromisos más que con la ciudadanía.
Más tarde, en la apertura de la planta Flextronics, el Presidente ofrecería a los juarenses no descansar hasta recuperar, en colaboración con el Gobierno estatal y el municipal, la seguridad de sus familias.
"Estamos dando pasos firmes para enfrentar un problema que sabemos que es serio (e) importante, que sabemos que no tiene una solución fácil, mágica o de corto plazo, pero que hay que enfrentar con toda determinación y es, precisamente, el problema de la seguridad y del crimen en nuestro País y, particularmente, en esta ciudad", recalcó.
El Gobernador Reyes Baeza, que se cuidó de no concentrar su discurso en torno de la inseguridad, planteó que era "importante también ofrecer, presentar, vender en el mejor de los términos, lo mucho bueno que tiene la frontera, las muchas posibilidades, virtudes, potencialidades y esfuerzos que realizamos todos".
Fuertemente custodiado por el Estado Mayor Presidencial (EMP), Calderón comprometió el apoyo del Gobierno federal a Ciudad Juárez, que en las últimas 72 horas resintió la muerte de al menos 12 personas vinculadas con hechos delictivos.
"Esta es una lucha (<00a6>) que sólo podremos ganar con unidad. Hoy se requiere que los tres órdenes de Gobierno y que la sociedad civil junto con el Gobierno cerremos filas y actuemos de manera corresponsable y coordinada para garantizar la seguridad de los ciudadanos", planteó.
El Mandatario federal efectuó una incursión de siete horas por esta ciudad fronteriza para inaugurar dos plantas y comer en privado con un reducido grupo de empresarios.
Tanto el Alcalde José Reyes Ferriz, como el Gobernador de Chihuahua, José Reyes Baeza, reconocieron la lucha que ha emprendido Calderón contra el crimen organizado, pero al mismo tiempo le pidieron que no descuidara la entidad.
"Quiero decirle a Ciudad Juárez, a los juarenses, a sus autoridades, que en esta batalla, hay que lograr que sea la ciudad segura que todos anhelamos que sea, no están solos.
"El Gobierno federal ha estado y seguirá estando con todo el apoyo a Ciudad Juárez", ofreció el Presidente durante la ceremonia de inauguración de una planta de lavadoras y secadoras de la firma Electrolux.
El Ejecutivo federal recordó que ante el aumento de la delincuencia que principios de año azotó a Juárez -y que achacó a la lucha que libran entre sí grupos criminales- su Gobierno tomó cartas en el asunto y dispuso el envío de al menos 4 mil elementos de las fuerzas federales y del Ejército para fortalecer la seguridad ciudadana.
Calderón se haría eco de la propuesta que para depurar los cuerpos policiacos puso sobre la mesa el Alcalde José Reyes, y consideró que este proyecto debía ser asumido por todos para contar con una Policía sin compromisos más que con la ciudadanía.
Más tarde, en la apertura de la planta Flextronics, el Presidente ofrecería a los juarenses no descansar hasta recuperar, en colaboración con el Gobierno estatal y el municipal, la seguridad de sus familias.
"Estamos dando pasos firmes para enfrentar un problema que sabemos que es serio (e) importante, que sabemos que no tiene una solución fácil, mágica o de corto plazo, pero que hay que enfrentar con toda determinación y es, precisamente, el problema de la seguridad y del crimen en nuestro País y, particularmente, en esta ciudad", recalcó.
El Gobernador Reyes Baeza, que se cuidó de no concentrar su discurso en torno de la inseguridad, planteó que era "importante también ofrecer, presentar, vender en el mejor de los términos, lo mucho bueno que tiene la frontera, las muchas posibilidades, virtudes, potencialidades y esfuerzos que realizamos todos".
Mayolo López, enviado, Reforma, 23 de julio.
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