No habrán albazos legislativos ni fast track ni dictámenes unilaterales sobre la reforma energética.
Este fue el primer acuerdo al que llegaron ayer los líderes nacionales del PRI, PAN y PRD en su primer encuentro trilateral.
Se buscará una iniciativa de consenso, que respete el marco constitucional, y en la que se tomarán en cuenta, “muy en cuenta”, las propuestas vertidas durante los debates celebrados en el Senado de la República, coincidieron.
Los tres dirigentes se comprometieron a evitar la polarización. “A nadie le conviene una iniciativa que polarice al país”, dijo Guadalupe Acosta Naranjo, líder sustituto del CEN del PRD.
“Estoy convencida de que la polarización debilita la vida institucional, la polarización abunda en generar rencores en la sociedad mexicana, la polarización hace que la irreflexión gane puntos en lugar de el análisis racional”, sentenció Beatriz Paredes.
Esto trascendió luego de la primera reunión celebrada entre los dirigentes del PRI, Beatriz Paredes; del PAN, Germán Martínez, y del PRD, Guadalupe Acosta Naranjo, en la que discutieron el tema de la reforma petrolera.
Hay un compromiso unánime, dijo Acosta Naranjo, de que no habrá fast track ni dictámenes por fuera de las comisiones. Las propuestas surgidas durante los foros del Senado serán consideradas como “material de trabajo adicional” para los dictamenes.
En este sentido, no apoyó el amago de “toma de tribuna” por parte de algunos legisladores de su partido, “para eso se convocó a este diálogo”, dijo.
Ante la reticencia de algunos miembros del PRD —que no estaban de acuerdo con esta reunión—, Acosta Naranjo dijo lacónico: “No necesito licencias para manejar mi vida política; con el aval del Comité Ejecutivo Nacional es suficiente”. Respecto al posible veto de Andrés Manuel López Obrador a estos acuerdos, Acosta dijo que el dirigente tendrá que precisar su postura, “yo no puedo hablar por él”.
“Lo que sí sé es que Andrés Manuel tiene una banca en el Consejo Nacional de nuestro partido; tiene voz, tiene voto, de la misma manera que lo tiene el ingeniero Cuauhutémoc Cárdenas, los gobernadores, los legisladores federales y los principales dirigentes del partido. En esa instancia se tomarán las decisiones del PRD”
Según Acosta Naranjo, Beatriz Paredes incluso consideró la posibilidad de acudir a votar en la consulta del próximo domingo y durante el encuentro hablaron de la necesidad de elevar a rango constitucional el tema de la democracia participativa.
La priísta Beatriz Paredes, advirtió que el diálogo con las dirigencias nacionales del PAN y PRD, no es para imponer decisiones en torno a la reforma energética, sino para favorecer el diálogo en el Congreso.
Paredes dijo ante reporteros, no creer en la “dictadura” de los dirigentes de partido, sino en el trabajo parlamentario; por tanto, anticipó que dejará en manos de los legisladores del PRI toda la negociación sobre este tema.
En diálogo con los reporteros de la fuente del PRI, Paredes también advirtió que su partido presentó su iniciativa no para quedar bien con el PAN o con el PRD, sino para sacar a Pemex de la grave situación en que está.
En este sentido, expresó su confianza de que las coincidencias que existen con el PRD empujen para modificar la iniciativa del Presidente Felipe Calderón.
El dirigente del PAN, Germán Martínez dijo que se llegó al compromiso de mantenerse “dentro del proceso legislativo”, y ello implica dictaminar.
Dijo que “nadie ha claudicado a sus posiciones y nadie está sometido a la voluntad del otro”.
Este fue el primer acuerdo al que llegaron ayer los líderes nacionales del PRI, PAN y PRD en su primer encuentro trilateral.
Se buscará una iniciativa de consenso, que respete el marco constitucional, y en la que se tomarán en cuenta, “muy en cuenta”, las propuestas vertidas durante los debates celebrados en el Senado de la República, coincidieron.
Los tres dirigentes se comprometieron a evitar la polarización. “A nadie le conviene una iniciativa que polarice al país”, dijo Guadalupe Acosta Naranjo, líder sustituto del CEN del PRD.
“Estoy convencida de que la polarización debilita la vida institucional, la polarización abunda en generar rencores en la sociedad mexicana, la polarización hace que la irreflexión gane puntos en lugar de el análisis racional”, sentenció Beatriz Paredes.
Esto trascendió luego de la primera reunión celebrada entre los dirigentes del PRI, Beatriz Paredes; del PAN, Germán Martínez, y del PRD, Guadalupe Acosta Naranjo, en la que discutieron el tema de la reforma petrolera.
Hay un compromiso unánime, dijo Acosta Naranjo, de que no habrá fast track ni dictámenes por fuera de las comisiones. Las propuestas surgidas durante los foros del Senado serán consideradas como “material de trabajo adicional” para los dictamenes.
En este sentido, no apoyó el amago de “toma de tribuna” por parte de algunos legisladores de su partido, “para eso se convocó a este diálogo”, dijo.
Ante la reticencia de algunos miembros del PRD —que no estaban de acuerdo con esta reunión—, Acosta Naranjo dijo lacónico: “No necesito licencias para manejar mi vida política; con el aval del Comité Ejecutivo Nacional es suficiente”. Respecto al posible veto de Andrés Manuel López Obrador a estos acuerdos, Acosta dijo que el dirigente tendrá que precisar su postura, “yo no puedo hablar por él”.
“Lo que sí sé es que Andrés Manuel tiene una banca en el Consejo Nacional de nuestro partido; tiene voz, tiene voto, de la misma manera que lo tiene el ingeniero Cuauhutémoc Cárdenas, los gobernadores, los legisladores federales y los principales dirigentes del partido. En esa instancia se tomarán las decisiones del PRD”
Según Acosta Naranjo, Beatriz Paredes incluso consideró la posibilidad de acudir a votar en la consulta del próximo domingo y durante el encuentro hablaron de la necesidad de elevar a rango constitucional el tema de la democracia participativa.
La priísta Beatriz Paredes, advirtió que el diálogo con las dirigencias nacionales del PAN y PRD, no es para imponer decisiones en torno a la reforma energética, sino para favorecer el diálogo en el Congreso.
Paredes dijo ante reporteros, no creer en la “dictadura” de los dirigentes de partido, sino en el trabajo parlamentario; por tanto, anticipó que dejará en manos de los legisladores del PRI toda la negociación sobre este tema.
En diálogo con los reporteros de la fuente del PRI, Paredes también advirtió que su partido presentó su iniciativa no para quedar bien con el PAN o con el PRD, sino para sacar a Pemex de la grave situación en que está.
En este sentido, expresó su confianza de que las coincidencias que existen con el PRD empujen para modificar la iniciativa del Presidente Felipe Calderón.
El dirigente del PAN, Germán Martínez dijo que se llegó al compromiso de mantenerse “dentro del proceso legislativo”, y ello implica dictaminar.
Dijo que “nadie ha claudicado a sus posiciones y nadie está sometido a la voluntad del otro”.
Jorge Octavio Ochoa yHoracio Jiménez, El Universal, 25 de julio.
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