Bogotá, 7 de julio. El gobierno colombiano perdió la confianza en los mediadores de Francia y Suiza y desde ahora buscará mantener contacto directo con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) para lograr la liberación de los rehenes que aún están en poder de la guerrilla e iniciar un proceso de pacificación, afirmó este lunes el comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo.
El apoyo de los mediadores se puso bajo la lupa después de descubrirse que el suizo Jean Pierre Gontard aparece en uno de los correos encontrados en la computadora del número dos de las FARC, Raúl Reyes, abatido por el ejército colombiano en Ecuador el pasado primero de marzo.
Los documentos de las computadoras involucran a Gontard como “portador” de 500 mil dólares de la guerrilla, incautados en Costa Rica poco después de la muerte de Reyes, hecho que, a consideración del gobierno, compromete de manera “muy grave” a los mediadores, indicó el funcionario al emisora La W.
Al parecer, el dinero sería producto de un secuestro, dijo Restrepo, y añadió que “el hecho de trasladar estos dineros y entregárselos a una organización al margen de la ley no tiene nada que ver con la facilitación”.
En el caso de Francia, el delegado Noel Saez ofreció a las FARC levantarles el calificativo de “terroristas, negociaciones directas y una oficina en París en febrero de este año”, aseguró Restrepo.
Para el comisionado, a juzgar por correos electrónicos hallados en los computadoras portátiles, los delegados “parecen más consejeros políticos de las FARC que facilitadores” y su trabajo “no produjo ningún resultado”.
Así, el gobierno buscará ahora contactar al máximo jefe de las FARC, Alfonso Cano, a través de Pablo Catatumbo, el nuevo integrante del secretariado de la guerrilla, con la intención de hablar de paz. “Creemos que ya no tiene caso seguir hablando de un acuerdo humanitario como paso previo, tenemos que hablar simultáneamente de las dos cosas”, liberación de rehenes y de paz, precisó.
Presunto pago de París por los secuestrados en 2003
Horas después, el telenoticiero de RCN señaló que Francia habría pagado en 2003 una suma de dinero no conocida para buscar la liberación de Ingrid Betancourt, rescatada de las FARC la semana pasada. Añadió que en una de las computadoras supuestamente de Reyes, se encontró una correo electrónico que indica que los negociadores franceses, entonces encabezados ya por Saez, fueron estafados buscando la liberación de la política.
RCN destacó que para esas fechas, julio de 2003, un avión militar francés aterrizó en Brasil en la frontera con Colombia a la espera de Betancourt.
En este contexto, los familiares de los 25 secuestrados canjeables reiteraron su preocupación por la reacción que pueda tomar el grupo rebelde luego del operativo militar que el pasado miércoles culminó con la liberación de la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt y de 14 rehenes más.
Hasta ahora las FARC no se han pronunciado sobre la liberación de los 15 rehenes, que junto a otros siete políticos liberados unilateralmente en enero y febrero, habían señalado como canjeables por medio millar de rebeldes presos.
El profesor Gustavo Moncayo, padre del suboficial del ejército Pablo Moncayo, secuestrado hace diez años, se declaró en favor de un pacto humanitario y no de un operativo militar que ponga en riesgo la vida de los secuestrados.
Moncayo, conocido como el “caminante de la paz” por la marcha de más de 800 kilómetros que realizó en territorio de Colombia y otra desde Bogotá a Caracas en demanda de un acuerdo humanitario, mencionó que el engaño e infiltración a la guerrilla “ponen en riesgo la vida de los rehenes que aún quedan”.
A su vez, la ex candidata presidencial consideró que su liberación fue un “jaque mate” para la guerrilla, pero advirtió que incluso si los rebeldes se disuelven, la paz no llegará a Colombia sin más desarrollo.
En declaraciones a Radio Francia Internacional, pidió a las FARC que rectifiquen y luchen por la vía democrática, y al presidente colombiano, Álvaro Uribe, que suavice su tono al negociar con la guerrilla, pues eso ayudará a asegurar la liberación del resto de los rehenes.
“Hemos llegado al momento en que hay que cambiar ese vocabulario radical, extremista, de odio” al abordar el problema de las FARC”, apuntó.
Al marcar sus diferencias con el presidente, dijo que para Uribe “el final de las FARC es el restablecimiento de la paz en Colombia. Para mí, la paz pasa por unas transformaciones sociales”, destacó.
En una ceremonia religiosa en Bogotá, a la que asistieron cuatro de los policías liberados junto con Betancourt, el sargento John Jairo Durán entregó a Emperatriz de Guevara el diario de su hijo, el mayor Julián Guevara, muerto en cautiverio hace dos años.
El presidente venezolano Hugo Chávez, en tanto, anunció una manifestación en rechazo a la “política guerrerista” del presidente colombiano durante su visita a Caracas el día 11, y con quien sostendrá una entrevista.
Encuentran 12 campamentos en Ecuador
Al cierre de esta edición, la televisora Ecuavisa, informó que 12 campamentos y viviendas de presuntos rebeldes de las FARC, algunos con habitaciones subterráneas donde había cadenas, fueron descubiertos por tropas ecuatorianas durante patrullajes por la frontera con Colombia.
Las bases estaban en un perímetro selvático de 40 kilómetros, en la provincia de Sucumbíos, y en su interior había pertrechos militares, municiones y documentos, señaló la cadena; no hubo capturas.
El apoyo de los mediadores se puso bajo la lupa después de descubrirse que el suizo Jean Pierre Gontard aparece en uno de los correos encontrados en la computadora del número dos de las FARC, Raúl Reyes, abatido por el ejército colombiano en Ecuador el pasado primero de marzo.
Los documentos de las computadoras involucran a Gontard como “portador” de 500 mil dólares de la guerrilla, incautados en Costa Rica poco después de la muerte de Reyes, hecho que, a consideración del gobierno, compromete de manera “muy grave” a los mediadores, indicó el funcionario al emisora La W.
Al parecer, el dinero sería producto de un secuestro, dijo Restrepo, y añadió que “el hecho de trasladar estos dineros y entregárselos a una organización al margen de la ley no tiene nada que ver con la facilitación”.
En el caso de Francia, el delegado Noel Saez ofreció a las FARC levantarles el calificativo de “terroristas, negociaciones directas y una oficina en París en febrero de este año”, aseguró Restrepo.
Para el comisionado, a juzgar por correos electrónicos hallados en los computadoras portátiles, los delegados “parecen más consejeros políticos de las FARC que facilitadores” y su trabajo “no produjo ningún resultado”.
Así, el gobierno buscará ahora contactar al máximo jefe de las FARC, Alfonso Cano, a través de Pablo Catatumbo, el nuevo integrante del secretariado de la guerrilla, con la intención de hablar de paz. “Creemos que ya no tiene caso seguir hablando de un acuerdo humanitario como paso previo, tenemos que hablar simultáneamente de las dos cosas”, liberación de rehenes y de paz, precisó.
Presunto pago de París por los secuestrados en 2003
Horas después, el telenoticiero de RCN señaló que Francia habría pagado en 2003 una suma de dinero no conocida para buscar la liberación de Ingrid Betancourt, rescatada de las FARC la semana pasada. Añadió que en una de las computadoras supuestamente de Reyes, se encontró una correo electrónico que indica que los negociadores franceses, entonces encabezados ya por Saez, fueron estafados buscando la liberación de la política.
RCN destacó que para esas fechas, julio de 2003, un avión militar francés aterrizó en Brasil en la frontera con Colombia a la espera de Betancourt.
En este contexto, los familiares de los 25 secuestrados canjeables reiteraron su preocupación por la reacción que pueda tomar el grupo rebelde luego del operativo militar que el pasado miércoles culminó con la liberación de la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt y de 14 rehenes más.
Hasta ahora las FARC no se han pronunciado sobre la liberación de los 15 rehenes, que junto a otros siete políticos liberados unilateralmente en enero y febrero, habían señalado como canjeables por medio millar de rebeldes presos.
El profesor Gustavo Moncayo, padre del suboficial del ejército Pablo Moncayo, secuestrado hace diez años, se declaró en favor de un pacto humanitario y no de un operativo militar que ponga en riesgo la vida de los secuestrados.
Moncayo, conocido como el “caminante de la paz” por la marcha de más de 800 kilómetros que realizó en territorio de Colombia y otra desde Bogotá a Caracas en demanda de un acuerdo humanitario, mencionó que el engaño e infiltración a la guerrilla “ponen en riesgo la vida de los rehenes que aún quedan”.
A su vez, la ex candidata presidencial consideró que su liberación fue un “jaque mate” para la guerrilla, pero advirtió que incluso si los rebeldes se disuelven, la paz no llegará a Colombia sin más desarrollo.
En declaraciones a Radio Francia Internacional, pidió a las FARC que rectifiquen y luchen por la vía democrática, y al presidente colombiano, Álvaro Uribe, que suavice su tono al negociar con la guerrilla, pues eso ayudará a asegurar la liberación del resto de los rehenes.
“Hemos llegado al momento en que hay que cambiar ese vocabulario radical, extremista, de odio” al abordar el problema de las FARC”, apuntó.
Al marcar sus diferencias con el presidente, dijo que para Uribe “el final de las FARC es el restablecimiento de la paz en Colombia. Para mí, la paz pasa por unas transformaciones sociales”, destacó.
En una ceremonia religiosa en Bogotá, a la que asistieron cuatro de los policías liberados junto con Betancourt, el sargento John Jairo Durán entregó a Emperatriz de Guevara el diario de su hijo, el mayor Julián Guevara, muerto en cautiverio hace dos años.
El presidente venezolano Hugo Chávez, en tanto, anunció una manifestación en rechazo a la “política guerrerista” del presidente colombiano durante su visita a Caracas el día 11, y con quien sostendrá una entrevista.
Encuentran 12 campamentos en Ecuador
Al cierre de esta edición, la televisora Ecuavisa, informó que 12 campamentos y viviendas de presuntos rebeldes de las FARC, algunos con habitaciones subterráneas donde había cadenas, fueron descubiertos por tropas ecuatorianas durante patrullajes por la frontera con Colombia.
Las bases estaban en un perímetro selvático de 40 kilómetros, en la provincia de Sucumbíos, y en su interior había pertrechos militares, municiones y documentos, señaló la cadena; no hubo capturas.
AFP, DPA, Reuters y Notimex, La Jornada, 8 de julio.
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